¿Por qué elegir nuestro servicio de cerrajero en Castellón?
Cerrajero urgente en Castellón no es un servicio de cerrajería rápida más, es la mejor opción para quienes buscan calidad en un servicio de primera a los mejores precios del mercado.
Nos respaldan más de treinta años de experiencia y nuestra larga lista de clientes satisfechos, porque ellos saben que son siempre nuestra prioridad y que su seguridad es nuestra misión.
Cerrajero en Castellón sabe lo importante que es para el cliente poder contar con un experto de confianza siempre que lo necesite, por eso en nuestros teléfonos encontrará respuestas durante las 24 horas del día y los 365 días del año. Incluso en los festivos y fines de semana, porque tenemos servicio regular y también de urgencia, para poder llegar y resolver de forma inmediata cualquier imprevisto. Contamos con unidades móviles en toda el área de cobertura y podemos llegar hasta su puerta en promedios de tiempo muy breves, que en las incidencias de urgencia, no suelen ser de más de 15 o 20 minutos.
Cerrajería en Castellón tiene todas las soluciones para sus cerraduras domésticas y comerciales, como en los ejemplos que siguen a continuación: apertura de puertas sin daños, sean interiores, exteriores o blindadas, apertura de cajas fuertes, extracción de llaves quebradas, automatismo de garajes, motorización de persianas, mantenimiento de persianas de metal o de pvc, candados de suelo para persianas, llaves maestras, cerraduras de “alta seguridad” y muchas otras respuestas para cada situación.
El antiguo Palacio de la Vila estaba situado en otra ubicación, cercana a la actual. Se decidió trasladar y construir esta nueva sede debido a las malas condiciones del edificio anterior. En agosto de 1687 se encargan las trazas al maestro Gil Torralba, paralizándose hasta que en 1689 se pone la primera piedra recayendo las obras en el maestro Melchor Serrano, Alcazar, Claret y José Serrano. Ante amenazas de derrumbe, finalmente el traslado se realizó en febrero de 1716, a pesar de no habiéndose terminado el nuevo edificio. Inaugurado el edificio, su interior fue finalizándose poco a poco.
Con los años se realizaron ampliaciones y reformas. Entre ellas cabe destacar la capilla de las prisiones y las propias prisiones, terminadas en 1806; así como la importante reforma del salón de Sesiones, que incluía la decoración de su techo con una pintura alegórica a la ciudad de Castellón. En 1916, el arquitecto Municipal D. Francesc Tomàs Traver lleva adelante un proyecto que cambió todo el aspecto de la fachada principal. Es ahora cuando desaparecen las rejas de hierro de las barandillas de los balcones, que fueron sustituidas por balaustradas de piedra artificial y también rompe el sentido originario de un balcón corrido en el piso principal que fue subdividido en tres. Por otro lado, en la parte alta de la fachada desaparecía el arranque de las torres de los ángulos, las cuales quedaron reducidas a un solo cuerpo rematado con molduras, pináculos y pirámides.